El avance de contagios por Covid-19 en el distrito tiene el mismo ritmo que la preocupación en las autoridades sanitarias de Tres Arroyos. En ese marco, y ante una coyuntura sanitaria cada vez más compleja, el secretario de Prevención y Salud, Gabriel Guerra, en diálogo con este diario, se refirió a la situación epidemiológica que reina en el partido, el cual, desde hace unas semanas, no para de sumar nuevos casos.
Eso está originando que el sistema de salud, tanto en lo que es infraestructura como en recursos humanos, esté casi al límite. De hecho, la Sala Covid 1, de las 17 camas disponibles, hasta anoche a las 21, 15 estaban ocupadas con pacientes contagiados, mientras que además se decidió reabrir la Sala Covid 2, con capacidad para internar a otras 20 personas.
En tanto, de las seis camas de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), cinco estaban ocupadas (de las cuales uno de esos pacientes no requería del respirador artificial), quedando libre solo una. En ese caso, está la posibilidad de sumar otras dos camas más para contener la suba de pacientes que requieran de la terapia.
En limpio, el área de UCI dispone de ocho camas y ocho respiradores, de los cuales, hasta anoche, había cuatro en uso. «Todavía tenemos un margen, pero, lamentablemente, uno se entera en el mismo momento que se colapsa el sistema. Por eso, tenemos prevista la posibilidad de aumentar el número de camas de internación y estamos más que alertas a los pacientes que requieren de la terapia intensiva», señaló.
En tanto, remarcó: «El sistema de salud también atiende otras cuestiones ajenas al Covid. Si el número de pacientes internados con coronavirus sigue en aumento, el sistema sanitario entrará en tensión y no se podrán dar respuestas».
Otra muestra elocuente de las consecuencias de la pandemia gira en torno al recurso humano. El propio Guerra admitió que, por el desgaste acumulado desde hace más de un año de intensa labor, personal médico y de enfermería del Centro Municipal de Salud presentó su renuncia.
Desgaste y renuncias Tras poco más de un año de pandemia, todo el personal de salud experimenta un intenso desgaste físico y mental. Eso provocó que se hayan producido en el último tiempo renuncias de médicos y enfermeros.
«Más allá de que preparó para eso, uno no deja de ser una persona. Todos tenemos un agotamiento físico y mental muy importante, lo cual está más presente que nunca», indicó.
Y tras la consulta de este diario, Guerra confirmó que, por la acumulación de cansancio y saturación, se produjeron renuncias de médicos y enfermeros, aunque no dio el número de la cantidad de alejamientos registrados. «Ya no le podemos exigir más horas ni más días de trabajo a quienes están tratando de llevar adelante esta situación», sostuvo el funcionario, quien agregó: «La idea es trabajar para evitar un posible colapso sanitario».
Pandemia vigente Ayer, como cada miércoles, se reunió el Comité de Contingencia. En ese marco, el secretario de Prevención y Salud expuso el momento sanitario que se vive a nivel nacional, provincial y, principalmente, local. «La aceleración de casos que preveíamos se está dando desde mediados de la semana pasada y la actual. Incluso, a la elevación del número de casos hay que sumarle un alto nivel de internación», sostuvo Guerra, quien, además, destacó que el número de consultas y de hisopados realizados.
«Tenemos que actuar para que no se produzcan los contagios. No hay que llegar a eso. Si nosotros nos manejamos exclusivamente por el número de respiradores disponibles, estaríamos llegando muy tarde»
«Significa que la gente está tomando más conciencia de la presencia de la enfermedad. A nosotros, eso nos sirve porque nos da la detección de un diagnóstico preciso y de un bloque y aislamiento de estos casos», manifestó.
El funcionario, en tanto, mostró su preocupación en torno a un eventual sostenimiento del elevado número de contagios registrado hasta el momento. «Las posibilidades de atender adecuadamente van a verse soslayada si se mantiene esa tendencia», dijo el funcionario, quien, como lo ha hecho en reiteradas ocasiones, instó a la población a que cumpla con las medidas preventivas ya conocidas.
Y agregó: «La pandemia está más vigente que nunca. Por eso, hay que prestar especial atención a la hora de llevar adelante los cuidados que corresponden y que se cumplan al máximo todos los protocolos sanitarios en cada actividad. De esa forma, y tal como pudimos superar una etapa compleja el año pasado, vamos a poder salir de la situación que estamos viviendo».
Guerra, ante la coyuntura presentada, manifestó: «Tenemos que actuar para que no se produzcan los contagios. No hay que llegar a eso. Si nosotros nos manejamos exclusivamente por el número de respiradores disponibles, estaríamos llegando muy tarde».
Guerra, a su vez, indicó que la suba de casos en nuestra ciudad todavía no refleja el movimiento turístico de Semana Santa. «Lo que se está dando ahora es previo a lo que pasó en Semana Santa. Lo que sucedió en esos días sintetiza una serie de situaciones que puede originar una suba en el número de contagios», expresó. (FUENTE LA VOZ DEL PUEBLO)